martes, 7 de mayo de 2013

Vamos a hablar de lactancia (II)

Como deje adelantado en el post anterior, quiero tocar el tema del establecimiento de la lactancia, en especial por los mitos que existen sobre ella.

Cuando salí de la clínica el pediatra que recibió a mi hijo me paso una tarjeta. En ella había escrito algo que me costó darle crédito: decía que debía alimentar mi niño cada tres horas y que si era necesario el complementaria su alimentación con la leche de formula "tal", porque hasta la marca estaba especificada.

Y no, los bebés recién nacidos no comen cada tres horas. Y no, no hay que complementar su alimentación con formula.

Explico desde mi experiencia y con datos.

Los estómagos de los recién nacidos son pequeños, pero la leche materna se digiere con facilidad (por eso los niños amamantados padece rara vez de cólicos). Por consiguiente, sus tomas son más frecuentes que las de un bebé que toma formula, aunque no se equivoquen: se alimenta mucho mejor.

A esto se suma que la lactancia no solo es para alimentarlos. Los recién nacidos llegan a un mundo extraño donde su única ancla es el pecho de su madre. A veces no entiendo como es tan difícil de asumir el cambio extremo de un bebé que pasó más de 37 semanas flotando en la calma de la panza de su madre, alimentado constantemente, con la temperatura adecuada y con los ruidos amortiguados  ¿Se imaginan? Pasa de eso a lo que es el mundo exterior: ruidos, frío, voces extrañas. El olor y la voz de su madre es lo que identifican en medio del caos y a ello se aferran.

Otro dato importante: de que des el pecho a demanda en el primer mes de nacido de tu hijo o hija, cada vez que el bebé quiera, dependerá el éxito o fracaso de tu lactancia. Así, la producción de la leche se va ajustando y se estabiliza a las necesidades de tu bebé. No hagas caso a gente que te diga que "pareces esclava", "ese niñ@ no se te despega".... La lactancia es un disfrute y si una no desprende ese egoísmo social condenará la lactancia. Además, quien dijo que es una esclavitud dar seno a su hijo o hija. !Para nada!

NO, NUNCA, NEVER....Usar biberones en el primer mes de nacido. Hasta que la lactancia no se establezca bien de bien, no se debe introducir teteras. En mi caso lo hice luego de que mi producción y demanda estaban reguladas, unas pocas veces a la semana, solo para que cuando entrará a trabajar mi hijo pudiera beber mi leche en un biberón. En caso de que no la quieran en biberón existen otras opciones: dárselas con una jeringa y  vasitos.

Leche materna dada en vasitos.

Leche materna dada con jeringa. Observen como se le coloca el dedo para simular le pezón.

Otra cosa importante y que siempre trae problemas, y provoca muchos abandonos de lactancias: la posición de amamantar y las heridas en los pezones. La inexperiencia y equivocaciones de lo primero causa lo segundo.







Yo la pasé mal, muy mal con eso. Busqué información y vi como debía ir la boca del bebé en el pezón, aunque lo hice cuando ya tenía las tetas destrozadas. Aguante dolor y untaba mi leche en los pezones. También me ayudo una crema para este fin, hay muchas en el mercado. Y nunca deje de pegar a mi bebo de mis senos. Eso sí, no comentan el error de tratar de ordeñarse con extractores con los pezones heridos, como yo lo hice: ordeñénse con las manos cuando no puedan aguantar la succión de sus bebés.

Si pinchan en la imagen podrán leer un manual sencillo de cómo extraerse leche manualmente.







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